Comercio Internacional

COMERCIO INTERNACIONAL: Café y petróleo, las claves en la recuperación de la economía del país

Café y petróleo, las claves en la recuperación de la economía del país PIB creció 2 %. Expertos creen que se puede romper tendencia de 14 trimestres de desaceleración.

La agricultura, y dentro de esta rama el café, lo mismo que la recuperación en la producción de petróleo le pusieron buena parte de la fuerza a la economía en el tercer trimestre del 2017, lapso en el que creció en un 2 por ciento. Ese resultado estaría rompiendo una fase de desaceleración que se inició a comienzos del 2014, y se apuntala, también, en el sector bancario y los servicios sociales y comunales.

De cada 100 pesos que la economía creció entre julio y septiembre, 34 los pusieron los establecimientos financieros, mientras que los servicios sociales (entre los que se incluyen la administración pública, salud y enseñanza) aportaron 25. Entre tanto, la agricultura puso 22 pesos. Según el Dane, en el tercer trimestre del 2017 la economía se expandió 0,8 puntos más que en igual trimestre del año anterior, cuando el resultado fue de 1,2 por ciento. Y en lo corrido del año (enero-septiembre), el crecimiento acumulado es de 1,5 por ciento en comparación con el mismo periodo del 2016. El crecimiento de 2 por ciento en el trimestre terminado en septiembre podría marcar el fin de una tendencia de desaceleración del producto interno bruto que lleva 14 trimestres. “Nuestra economía sigue dando señales de recuperación sostenible, ratificando que supimos recibir el choque externo. Seis de las nueve actividades económicas repuntaron, destacándose la agricultura, la ganadería y la pesca”, indicó el presidente Juan Manuel Santos. El sector agropecuario es clave en este repunte, pues creció 7,1 por ciento en el trimestre, mientras que hace un año caía en 0,6 por ciento. Dentro del agro cobra relevancia el protagonismo del café, que crece al 21 por ciento, mientras que hace un año caía al 16 por ciento. La minería también refleja un comportamiento singular. Si bien registra una caída de 2,1 por ciento, hay que resaltar que cae menos que hace un año (-6,6 %), ayudando de esta manera a que frene la desaceleración. Y dentro de este sector, por primera vez en nueve trimestres, la producción de petróleo tuvo un aumento (1,4 %). La caída del resto de minerales explica el resultado negativo de toda la rama, en la que se destaca en particular la descolgada del carbón (-10,6 %). Otro renglón que merece mucha atención es el de construcción. Hace un año crecía al 7,1 por ciento, pero en el tercer trimestre se contrajo (-2,1 %). Hay que recordar que esta rama de la economía está integrada por obras civiles, que logró una expansión de 8,8 por ciento, pero este buen comportamiento fue borrado por el efecto que tuvo el otro componente del sector: las edificaciones, que bajaron en 15,9 por ciento. Por ello, según el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, a corto plazo, “el foco tiene que ser el sector de vivienda”.

No obstante a esta recuperación, y a la expectativa del Gobierno de que “ya pasó el momento más difícil”, Cárdenas anunció que la proyección de crecimiento para todo el 2017 fue revisada a la baja, desde 2 por ciento a un rango de entre 1,7 y 1,9 por ciento, con un punto medio de 1,8 por ciento, para lo cual, en el último trimestre del año la economía tendría que acelerar y expandirse en 2,7 por ciento. Este ritmo, para analistas del grupo BVBA, es difícil de lograr, pues “

¿Sector del agro podrá seguir sobre ruedas?

Camilo Pérez, gerente de investigaciones económicas del Banco de Bogotá, subraya “el destacado comportamiento de la actividad agropecuaria, explicada por el dinamismo de la producción cafetera, que reflejó las más favorables condiciones climáticas y también la mayor recolección del grano”. Sobre este sector, el director de Fedesarrollo, Leonardo Villar, es optimista con las perspectivas del agro, por cuanto “en el acumulado del año ya se ve un aumento de las exportaciones de productos agrícolas”. Para el analista, si bien la alta participación del café en el resultado del agro puede tener algo de coyuntural, también hay otras ramas que se están comportando bien. Es el caso de “productos como palma, bananos y otros nuevos que están empezando a crecer y se pueden convertir en importantes, como el aguacate Hass y la piña, que tienen perspectivas interesantes para el futuro”. Para Villar, “si se está viendo en el sector agropecuario un impacto de la depreciación del peso y de la mejor capacidad para competir, esto debería conducir a una política un poco más abierta para el sector”. Recomendó que, “en lugar de mantener cultivos tradicionales con proteccionismo a través de subsidios, se dediquen a proveer servicios públicos para la agricultura, para que gane capacidad de ser competitiva”. Daniel Velandia, de Credicorp Capital, dice que sigue esperando que la economía tome fuerza, acelerándose a 2,5 por ciento en 2018. Entre tanto, el Gobierno mantuvo su previsión de 3 por ciento para ese año.

Promover confianza, la tarea para animar actividades débiles

Tres de los sectores que más generan empleo en la economía son precisamente los que deben ponerse en la mira para que empiecen a entrar en la senda del repunte: construcción, comercio e industria.  La industria, por ejemplo, que se contrajo en 0,6 por ciento, mientras que hace un año lograba incrementos de 1,4 por ciento, contó con la ayuda de los productos ligados al café (10,7 %) y la rama de papel y cartón (5,1 %), entre otros. El dinamismo de estos renglones mermó la caída de algunos productos afectados por la demanda interna, como cueros, textiles y metalúrgicos. El comercio, cuya expansión solo fue de 1,4 por ciento en el tercer trimestre, impulsado principalmente por los hoteles, restaurantes y bares, que creció 3,1 por ciento, tiene una oportunidad en el último tramo del 2017, que avanza a buen ritmo por la temporada decembrina. Si el comercio mejora, la industria produce; por eso, Leonardo Villar, director de Fedesarrollo, dice que es clave la recuperación de la confianza del consumidor. “El comercio tuvo un crecimiento bastante pobre, hay que esperar a que empiece a repuntar. Aún los indicadores de confianza de los consumidores se mantienen en niveles negativos, pero en la medida en que empecemos a observar mejoría en la economía y esto se comience a reflejar en los ingresos de los colombianos, también puede recobrarse la confianza necesaria para subir la demanda interna”. En cuanto al sector de la construcción, en particular el de las obras civiles que requiere mantener dinamismo, una de las preocupaciones es la entrada en vigor de la ley de garantías. En ese sentido, el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, expresó que esta norma “no impide que haya contratación pública. Lo que indica es que se utilicen procesos licitatorios para contratar”. Villar también dijo que las obras civiles “no se verán muy afectadas por la ley de garantías. Hay un componente que es de entidades territoriales, y es muy grande en inversión. La ejecución de esas obras se va a seguir dando de manera normal. Más aún si la contratación se debió hacer antes de empezar dicha ley, por lo que la ejecución no se detiene”. Otro elemento que ayudará a que obras civiles continúen en el último trimestre con buen pedaleo es el de la ejecución de obras de cuarta generación (4G). “Hasta ahora, los datos son superiores a lo esperado”. En cambio, agregó, “donde hay mucha preocupación es en edificaciones (construcción de vivienda y sector no residencial (este último cayó en 27,4 %) y la persistencia de cifras negativas en industria y minería”. Los expertos de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional advirtieron que el panorama que muestra la construcción, que tradicionalmente “es apalancador del crecimiento económico y engrane de la industria, al reflejar una caída en construcción de viviendas nuevas y demás, muestra el problema por corregir de encadenamiento de la economía”.

Fuente: El Tiempo Imagen: Archivo El Tiempo Ver artículo original]]>